En estos tiempos en los que cientos de personas mueren a diario intentando dejar atrás un país sin esperanza y buscando una nuevas oportunidades, me acuerdo a menudo de estas palabras de Montesquieu que descubrí hace unos 15 años y que por entonces me impresionó favorablemente:
"Si yo supiese algo que me fuese útil y que fuese perjudicial a mi
familia, lo expulsaría de mi espíritu. Si yo supiese algo útil para mi
familia y que no lo fuese para mi patria, intentaría olvidarlo. Si yo
supiese algo útil para mi patria y que fuese perjudicial para Europa, o bien que fuese útil para Europa y perjudicial para el género humano, lo consideraría como un crimen, porque soy necesariamente hombre mientras que no soy francés más que por casualidad."
Ahora, que han pasado los años y he visto demasiadas cosas que me han hecho avergonzarme de mi especie, me pregunto si no seremos humanos también por casualidad.